1er. encuentro de Ford A del interior del País

1er. encuentro de Ford A del interior del País

1er.  encuentro de Ford A del interior del País
1er.  encuentro de Ford A del interior del País
1er.  encuentro de Ford A del interior del País
1er.  encuentro de Ford A del interior del País
1er.  encuentro de Ford A del interior del País

Eugenio "el Cholo" Caussi tiene un espíritu muy inquieto, siempre con ideas renovadoras y locas dando vueltas en su cabeza. El es el Presidente actual del "Esperanza Autos Antiguos y Especiales" y también fanático del Ford A, lo demostró uniendo La Quiaca con Ushuaia con su Phaeton 28 conmemorando los 100 años del Ford A. Entre sus ideas locas fue que el club de Esperanza organizara un encuentro Ford A, el primero del interior de país. Como de costumbre, a muchos les pareció que la idea era demasiado loca, que geográficamente Esperanza estando a 500 Km de Buenos Aires estaba muy lejos, que a nadie le va a interesar venir a un encuentro de un solo tipo de auto… Sin embargo, el empuje del "Cholo" sembrando la semilla de la idea hizo que ésta germinara lentamente entre la Comisión Directiva y miembros del club, poniéndose al hombro su organización, particularmente en la figura del Secretario Luis Stegmayer. No por nada siempre se dice que los locos abren los caminos para que lo transiten los genios…. Asados bien regados por medio y varias reuniones donde todos aportaron ideas, poco a poco se fue gestando la organización de tal evento. Todo el mundo colaboró, incluyendo las autoridades municipales de Esperanza.

La mañana del encuentro, Marisa y yo fuimos con la Vikinga estacionando en la Plaza San Martin. Fuimos los primeros en llegar en Ford A. Si bien era temprano, el asunto no pintaba muy bien. ¿Vendrían muchos autos? Fuimos hasta el Club Social a inscribirnos donde esperaban a los participantes con café y la infaltable torta Alemana que es una especialidad local basada en recetas de los pioneros de esta colonia agrícola.

Poco a poco fueron llegando Ford A's de todo tipo, los restaurados, los convertidos en baquets y hasta hot rods. Finalmente llegaron más de 50 autos, todo un éxito. Dos camiones Ford A llamaron mucho la atención, el primero con el logo de la firma de Cacao "El Quilla" bellamente restaurado, mientras que el otro un sorprendente camión que aun no ha dejado de trabajar y lo sigue haciendo a diario en la ladrillería "Amo y Señor" del Sr. Heidegger.

El evento llamo la atención de varios medios periodísticos locales incluyendo de programas televisivos locales y de Rosario y radios de Santa Fe.

Con los autos fueron llegando viejos conocidos de CAdeAA desde Rafaela y Santa Fe tales como los matrimonios Clavijo, Yost, Catalin, Zuil, Darío Lopez Ferro, etc. Con todos nos reuníamos para hablar de viejos tiempos, escuchar la banda de música municipal y comentar anécdotas del encuentro. Por ejemplo la del Sr. Hugo Gómez que para estar presente en el evento se vino el día anterior desde Santa Rosa, La Pampa. Al alojarse en el hotel se le acercó un joven preguntándole si era el propietario del auto antiguo estacionado afuera, al responder que sí, el joven le pregunto si no lo llevaría a la Iglesia esa noche pues se casaba. El pampeano acepto gustosamente y como premio lo invitaron a la fiesta de casamiento. Dice que la paso muy bien. Cerca del mediodía salimos a dar una vuelta por la ciudad, visitando lugares históricos y de mayor interés, retornando a la plaza San Martin para disfrutar de un excelente almuerzo en el Club Social. Alli se entregaron suvenires se realizó al conteo de votos de los participantes eligiendo a mejor Ford A en las categorías Auto, Baquet y Hot Rod. Los elegidos fueron: Mejor Ford A: Fordor 1931 de Sergio Ockstadt de Humboldt Mejor Baquet: Ford A 1928 de Daniel Felipa de Esperanza Mejor Hot Rod: propiedad de Damián Machín de Frank

Además se entregaron premios a: Los mejor vestidos de época: Catalin y Sra. Ford A que vino de más lejos: Tudor 1930 proveniente de Santa Rosa, Hugo Gómez.

Eugenio Caussi cerró el encuentro convocando a los más de 50 para el año próximo para que este evento se convierta en tradicional y que, en lo posible, cada participante invite por lo menos a otro Ford A a fin de superar las 100 unidades. Cerramos la jornada en mi casa disfrutando de un buen café con Rita y Juan Carlos Clavijo y Dario Lopez Ferro recordando con mucho cariño gratos tiempos pasados con su inolvidable padre, Emilio Lopez Ferro.

Por: Armin Breitling
Fotos: Alberto Schachner